Nº 26 "Ermita Nuestra Señora de Los Milagros"

Tarjeta Postal Nº 26

Tirada: 48 ejemplares

Fecha: 5 mayo 2008

Impresor: Rota Grafic

Con motivo de la puesta en circulación del sello personalizado.

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En los terrenos de la Acebuchal Alta de nuestra ciudad, por encima de la finca conocida por “El Chaparral” y la carretera de acceso que lleva su nombre, se encuentra la Ermita de Nª. Sª. de Los Milagros.

Esta Ermita fue construida en 1946 por Don Pascual Cervera Jacome, en memoria de los 788 hombres que perecieron en el hundimiento del “Crucero Baleares” el 6 de Marzo de 1938, que se hundió, al ser alcanzado por dos torpedos, escorándose a las 02,19 horas, con diversos incendios a bordo para hundirse inmediatamente. Perdieron la vida en este naufragio el Contraalmirante Manuel de Vierna Belando y el Capitan del Navío Isidro Fontenia Maristany. 435 hombres fueron salvados y rescatados de la mar por dos destructores de la “Royal Navy”, El “Boreas” y “Kempenfelt”.

La Ermita de Los Milagros adopta su nombre por la esposa de su promotor. En su interior, al frente, podemos contemplar la “Cerámica de Nuestra Señora de Los Milagros”, a la izquierda una preciosa maqueta del “Buque Baleares” con unas lozas y los nombres de la Tripulación. A la derecha un Crucifijo, esto es todo lo que podemos apreciar en el interior de la Ermita. En el exterior contorneando la misma y debajo de los soportales o arcos que la rodea podemos contemplar las estaciones de Via-Crucis que se encuentran embutidas en sus paredes.

La Ermita de Los Milagros, ha sido desde que tenemos uso de razón un sitio de parada, un punto donde nos hemos podido orientar cuando hemos estado perdidos, un sitio de meriendas. La Ermita se podía divisar desde varios kms. a la redonda y ha formado parte del paisaje desde su construcción dándole belleza y alegría al entorno.

En los últimos años y debido a la saturación de la construcción, ha sido encerrada entre los diversos bloques de pisos que han hecho en la zona, pero aún pasamos por ese lugar buscándola con la vista, pues no podemos olvidarnos de ella fácilmente.

Sirva este sello personalizado para inmortalizar y hacer de esta Ermita, un lugar de recreo y oración para todo el que desee tener unos minutos de retiro y de meditación en cualquier momento.

Fernando Ruiz Parias